Puerto Seco aguanta con la actividad logística y la exportación de las empresas burgalesas. En el caso de los materiales de automoción el transporte ha disminuido. Esto se compensa con le aumento de la actividad que proviene de la industria de la alimentación.

Actualmente, se mueven tres trenes mixtos a la semana que llevan contenedores a temperatura ambiente y una decena de refrigerados, novedad del 2020 y de la cual hace gran uso Campofrío Frescos. No obstante, se espera que otras industrias puedan interesarse por esta zona y así captar más clientes.

Además, el Puerto Seco ha incorporado la figura aduanera de Local Autorizado para Mercancías de Exportación (LAME) con un laboratorio destinado a Sanidad Vegetal y acortar los tiempos en el movimiento de mercancías refrigeradas.

De esta forma, el movimiento de refrigerados es una apuesta de futuro para el Puerto Seco. Aunque la actividad se paralizó en marzo debido al covid prácticamente al inicio de su puesta en marcha, desde junio se ha retomado el servicio. Únicamente Zaragoza y Madrid tienen en marcha esta actividad con contenedores ‘reefer’ por lo que con la incorporación de Burgos se espera captar nuevos clientes y la consolidación.

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Noticia de la ampliación de 2020