Cuarenta años de éxito para Burgos, para Castilla y León y para Johnson Controls avalan a la fábrica de baterías de Villalonquéjar como «la más eficiente y productiva a nivel global» de la multinacional norteamericana y la convierten en «piedra angular» de su estrategia a nivel europeo. El vicepresidente de la corporación, Johann-Friedrich Dempwolff, destacó el sábado 18 de octubre, durante la celebración oficial de este aniversario a la que asistió el presidente de la Junta, que la planta se ha consolidado en estas cuatro décadas como «proveedor líder en tecnología de baterías de primer nivel» para el mercado del automóvil continental, éxito que atribuyó y agradeció especialmente a sus cerca de 300 empleados.
Dempwolff, máximo responsable para Europa, Oriente Medio y África de la división Power Solutions, explicó en su intervención que Johnson Controls es una empresa «global multisectorial líder en diversificación tecnológica», que no solo fabrica baterías para los coches, sino que también está presente en Burgos en los equipos de calefacción y aire acondicionado del Hospital Universitario o en los asientos de los automóviles, entre otros bienes y servicios.
El gigante norteamericano reúne a 170.000 trabajadores en su plantilla y vende sus productos en más de 150 países. Su facturación fue de 42.700 millones de dólares americanos en 2013. La división Power Solutions, en la que se enmarca Burgos, es líder en baterías de motor de arranque para automóviles, con la marca Varta entre las más conocidas, y en aplicaciones de la tecnología start-stop. Ambos productos salen de la planta de Villalonquéjar, consolidada como «un ejemplo de innovación y desarrollo». Por ello, añadió, en 2011 se tomó la decisión de fabricar aquí las baterías start-stop, manteniendo la inversión para aumentar su capacidad de producción, que se cifra en 10 millones de unidades anuales (hasta la fecha ha fabricado más de 94 millones).
«Estamos desarrollando una tecnología respetuosa con el medio ambiente, innovadora y con capacidad de crecimiento, dado que prevemos que se alcanzarán los 35 millones de automóviles en el mundo antes de 2017 con estas baterías, siendo Europa el principal mercado». Esta tecnología, recordó, reduce las emisiones (estimadas en más de 10 millones de toneladas de emisiones de CO2 en cinco años)y el consumo.
«Podemos ofrecer una cartera de tecnologías innovadoras de eficacia probada por los principales fabricantes de automóviles del mundo y proveedores de recambios, convirtiendo así a Burgos en una pieza clave de nuestra estrategia en España y global». Esta producción se exporta a toda Europa, Turquía y el norte de África. «El alto nivel de calidad y de competitividad -añadió el directivo- son dos cualidades sobre las que se cimienta la posición de esta fábrica a nivel global y su desarrollo futuro».
El director de la fábrica burgalesa, Eduardo Quintanal, se mostró orgulloso en su intervención de que «el compromiso con Burgos y con la región es firme y así lo demuestra nuestra historia». «Mantenemos un alto nivel de inversión y generamos empleo estable, lo que contribuye al crecimiento industrial y económico de la región», subrayó. Resaltó además, que su empresa se ha significado, entre otros campos, por impulsar tecnologías propias que luego se han puesto en marcha en el resto de fábricas del grupo.
Fuente: Diario de Burgos